La porosidad del cabello es la capacidad que tiene la hebra de absorber y retener la humedad y otras sustancias en su interior. Esta capacidad depende del estado de la cutícula y que tan abierta se encuentre. La cutícula es la capa externa de la hebra, y se ve como escamas o tejas colocadas unas sobre otras; es flexible y puede abrirse para permitir que los aceites y el agua entren y salgan del cabello.

La porosidad es genética, pero puede verse afectada por agentes externos que pueden debilitar la hebra:

– Químicos: mechas, tintes, alisados, permanentes, sulfatos muy fuertes.

– Ambientales: la sal, el cloro, el sol, el viento, climas muy secos.

– Térmicos: planchas y secadores a temperaturas muy altas.

– Daños diarios: cepillos, toallas, atar el pelo con presión.

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Determina la porosidad de tu cabello

Te sugerimos dos metodos para conocer que tan poroso es tu cabello:

PRUEBA DE POROSIDAD EN VASO:

– Toma un par de cabellos limpios y secos y colócalos dentro de un vaso transparente, déjalos por alrededor de 2 a 3 minutos y observa si se encuentra flotando en la parte alta, media o se encuentra en la parte baja del vaso. Si se encuentra flotando tu porosidad es baja, si se encuentra en el fondo del vaso, tu porosidad en alta.

PRUEBA DE DESLIZAMIENTO:

 Toma un cabello y desliza los dedos desde la punta hacia arriba (hacia el cuero cabelludo). Si tus dedos se deslizan suavemente sin notar pequeños bultos (escamas levantadas) es posible que tengas baja porosidad.

Porosidad Baja

El cabello con porosidad baja tiene una capa de cutícula muy unida con escamas superpuestas que quedan planas. Este tipo de cabello generalmente se considera saludable y, a menudo, es muy brillante, especialmente cuando es de color oscuro. El cabello de baja porosidad repele la humedad cuando intentas mojarlo y es difícil de procesar porque resiste la penetración de productos químicos.

El cabello de baja porosidad requiere humectantes ricos en emolientes como manteca de karité, aceite de jojoba, aceite de coco y aceite mineral. También se beneficia de los productos humectantes, que atraen y mantienen la humedad en el cabello. Elija productos más ligeros a base de líquidos, como las leches capilares, que no se asienten en su cabello y lo dejen aceitoso o grasoso.

Porosidad Media

El cabello con porosidad media a menudo requiere la menor cantidad de mantenimiento. La capa de la cutícula es más suelta, lo que permite que entre la cantidad justa de humedad y evita que se escape demasiada. El cabello con porosidad normal tiende a mantener bien los peinados y se puede aplicar permanente y teñir con resultados predecibles. Sin embargo, con el tiempo, estos procesos pueden dañar tu cabello y aumentar su porosidad.

Para beneficiar al cabello de porosidad media, puedes complementar con el uso ocasional de mascarillas de acondicionamiento profundo a base de proteína, pero evita utilizarlas diariamente. 

Porosidad Alta

La porosidad alta puede ser una propiedad inherente del cabello o el resultado de daños por procesamiento químico, tratamiento brusco o daño ambiental.
 
El cabello de alta porosidad tiene huecos y agujeros en la cutícula, lo que deja demasiada humedad en el cabello y lo deja propenso al encrespamiento y enredos en climas húmedos. Incluso actos simples como bañarse, nadar y lavarse con shampoo pueden causar más daño y rotura debido a la gran cantidad de humedad que el cabello altamente poroso puede absorber.
Puedes utilizar anti-humectantes en climas con mucho calor y humedad, ésto ayudará a sellar las cutículas dañadas y evitará que absorban el exceso de humedad en el aire.
 
Debido a que el cabello altamente poroso también puede perder humedad fácilmente, es importante usar selladores, productos hidratantes y acondicionadores leave-in (Sin enjuage).